miércoles, 13 de enero de 2016

Galletas Invernales de Turrón.

¡Muy buenas!

Ya estoy aquí dando guerra, tranquilos, no he desaparecido. Es solo que las fiestas me absorben y luego tengo que superar la resaca post-navideña...No es fácil ¿eh?

Pues eso, como hay que desintoxicarse poco a poco, no sea que nos de un síndrome de abstinencia, hoy os traigo unas galletas de turrón. Estas galletas son super fáciles y muy resultonas, y además nos ayudan a ir gastando los restos mortales de turrón que nos han quedado de estas fiestas, para que no queden olvidados en la despensa... o nos lo comamos así en un arranque de nostalgia navideña (o glotonería, llamadlo como queráis).



Esta receta no es de cosecha propia, la  saqué de una revista que tengo en casa desde hace...3 años, de recetas para Navidad,  y hace poco vi una receta de galletas de turrón que compartió una compañera bloguera y me animé a buscar la revista y hacerlas y decorarlas. 








Ingredientes: Para 20-24 galletas (dependiendo del tamaño)
  • Para las galletas:
    200g de turrón del blando (Jijona)
    1 huevo
    100g de mantequilla a temperatura ambiente
    250g de harina
  • Para la glasa: 
    35g de claras
    200g de azúcar glas
    1/2 cucharadita de zumo limón
  • Pintar: 
    Colorantes en polvo y brillos comestibles.
    Licor blanco (anís, vodka, tequila)


Elaboración: 
  • Para las galletas: 
    En un procesador de alimentos (robot picador) trituramos el turrón con el huevo hasta obtener una crema de turrón. Reservamos.
    En la batidora (con la pala) mezclamos la mantequilla con el azúcar y batimos hasta obtener una crema pomada.  Añadimos la crema de turrón  y mezclamos muy bien, por último incorporamos la harina. 

    Hacemos una bola con la masa, la aplanamos ligeramente, envolvemos en film de plástico y refrigeramos en la nevera 1 hora. Si nos sobra podemos congelarla sin problema hasta un mes.

    Una vez refrigerada, la sacamos de la nevera y precalentamos el horno a 180ºC.  Estiramos la masa con un rodillo entre dos papeles de horno dejándola con un grosor de 8 milímetros (aproximadamente), cortamos nuestras galletas con el cortador que más nos guste y las vamos poniendo en la bandeja de horno forrada con papel sulfurizado.  

    Horneamos las galletas por 10-12 min. en el centro del horno, cuando estén listas  las dejaremos enfriar sobre una rejilla. 

    En mi caso hice dos tipos de galletas, unas con un cortador de muñeco de nieve y otras de copo de nieve (2 tamaños).  

    Recordad que las galletas más pequeñas necesitan menos tiempo de horneado y no nos podemos despistar o se nos tostarán (como me pasó a mi...).

    Después de hornear las galletas podemos decorarlas o no... podemos espolvorear con azúcar glas,  darles un baño con glasa y pegarle almendra crocanti. O antes de hornear pegarle virutas de turrón, lacasitos, etc. 



  • Para la glasa:
    Batimos las claras y cuando empiecen a montar agregamos poco a poco el azúcar hasta integrarlo todo, añadimos también el zumo de limón y mezclamos hasta que este todo homogéneo.  

    La glasa resultante es la de delineado, debe ser densa y quedar pegada en las varillas.  

    Rellenamos nuestra manga con una boquilla redonda fina (nº1-2), utilizando un poco menos de la mitad de la glasa, y delineamos el contorno de nuestras figuras.  

    A la glasa que habíamos reservado le agregamos unas gotitas de agua y mezclamos bien, rellenamos nuestra manga o biberón y rellenamos lo que antes habíamos delineado. Eliminamos imperfecciones con un palillo y dando golpecitos con la galleta plana en una superficie para que queden lisas. Dejamos secar unos 5 minutos, no completamente.

    Lo siguiente es hacer el efecto irregular en el cuerpo de los muñecos que se consigue poniendo glasa en pegotes (sin mucho miramiento) y extendiendo con un pincel. Dejamos secar 15 minutos. 

    Por último trazamos con glasa de delineado las bufandas y los gorritos, también la nariz (a mi se me pasó por alto). Dejamos secar mínimo 6 horas, yo aconsejo de un día para otro.

    Los copos de nieve los decoré sumergiendo la parte superior en glasa, escurriendo y dejando secar. 


  • Para pintar: 
    Cómo veis mis galletas no están hechas con glasa de colores, que se puede hacer perfectamente si disponéis de varias boquillas del mismo número.  Mis galletas están todas trazadas en blanco y luego pintadas a mano los detalles con colorantes en polvo diluido en alcohol.  

    Los copos tienen brillo perlado aplicado en seco, aunque no se aprecie en las fotos.


¡Y eso es todo! Lo de decorarlas es muy entretenido, pero no es imprescindible ¡Solas están riquísimas! Y así poco a poco vamos olvidándonos de los turrones... ¡hasta el año que viene, que siempre vuelven!



Da un poco de penita hincarles el diente con esa carita pero... también podemos pintarles cara de diablo, así cuesta menos :D




Vuelvo en unos días con una nueva receta. 

¡¡Un abrazo!!